Jennifer López, la célebre cantante estadounidense conocida como JLO, afronta de nuevo una demanda por infracción de copyright al publicar fotos de ella misma en una fiesta de Hollywood sin permiso del autor y sin otorgar el crédito correspondiente. El fotógrafo Edwin Blanco y la agencia para la que trabaja, BackGrid USA, han presentado sendas denuncias ante un tribunal federal alegando ser los copropietarios de los derechos de autor de las imágenes publicadas por la artista en sus redes sociales.
Las demandas se presentaron el 17 de mayo y se centran en dos imágenes realizadas en la alfombra roja del evento previo a los Globos de Oro celebrado por Amazon MGM Studios y Vanity Fair en el bar Marmont de Los Ángeles. Tras la fiesta, la cantante publicó las fotos en Instagram y en X, donde cuenta por millones el número de seguidores: 248 y 43,6, respectivamente. En ellas, lucía un abrigo de piel blanco y un vestido lencero acompañados por un bolso de Chanel. Los repost por parte de sus fans y marcas de moda se multiplicaron a velocidad de vértigo.
Publicación comercial, no personal
El abogado Peter Perkowski, que representa a Blanco y a la agencia BackGrid, encuentra en esta circunstancia los argumentos para la denuncia. «El uso no autorizado de las imágenes por parte de la Sra. López tiene naturaleza comercial, con el propósito de autopromocionarse», alega. Además, asegura que la artista utilizó las fotos para destacar al diseñador de su ropa y joyería «aprovechando la publicidad del evento para promover sus afiliaciones de moda y asociaciones de marca», ha asegurado Perkowski en declaraciones a Billboard. Este interés comercial se justifica al haber etiquetado la artista a sus socios de moda en los pies de foto, lo que ha permitido al abogado de los demandantes presentar las publicaciones como una acción de marketing y no como una publicación personal. «Una distinción importante en casos de infracción, donde las defensas por uso legítimo suelen fracasar», indica Fstoppers.
Acuerdo económico previo verbal
El contenido de las demandas también revela que, a la semana siguiente de la infracción de copyright, las partes se reunieron. Un representante de Blanco y BackGrid mantuvo «discusiones fructíferas» con el equipo de JLO que concluyeron en un acuerdo económico verbal.
Sin embargo, la artista nunca lo firmó por escrito ni realizó el pago de la suma acordada. Con el paso de los meses, el fotógrafo y la agencia han optado por reclamar a la cantante por vía judicial una indemnización que podría resultar millonaria: hasta 150.000 dólares por cada foto utilizada y la celebración de un juicio con jurado, informa Los Angeles Times.
Reincidencia del uso no autorizado
Del mismo modo, Perkowski hace referencia en las denuncias a la reincidencia de la cantante demostrando un «desprecio intencional por los derechos de autor», indica Billboard. Cita un caso de 2019 en el que también compartió sin permiso en Instagram unas fotos de ella y su entonces novio, Álex Rodríguez, que se cerró con la retirada voluntaria de los demandantes. El abogado considera que, desde entonces, la estrella estadounidense ya es conocedora de los requisitos legales y las consecuencias de usar imágenes protegidas sin autorización. De momento, ni JLO ni su equipo ha realizado declaraciones públicas respecto a las demandas. Cada una de ellas se ha asignado a un juez y, en ambos casos, los representantes legales de la artista cuentan hasta mediados de este mes para presentar sus alegaciones.
Cabe mencionar que la ley de derechos de autor de Estados Unidos otorga a los fotógrafos los derechos de autor de sus trabajos, incluso en el caso de que se obtengan de manera invasiva. Así, la norma favorece a estos profesionales y a las agencias que pudieran tener las licencias de sus imágenes. Esto supone que las celebrities no pueden utilizar sus fotos, aunque sean de ellas mismas, de manera gratuita.
Fuentes: Billboard, Fstoppers, Los Ángeles Times.
