1089. EL OFICIO DE TORERO

Al contemplar mi rabo todo erecto,

levemente a la izquierda ladeado,

con la cabeza roja y empalmado

del gusto un mete y saca que te inyecto.

Quiero que notes como te proyecto

en el interior la leche que ha cuajado,

quiero que sientas el calostro aguado

que esputa mi cipote predilecto.

Mis gónadas vacías, solazadas

de tanto golpearte en el trasero,

descansan medio rotas y cascadas.

El oficio me encanta de torero

aunque a mí las corridas y estocadas

siempre acaben costándome el dinero.

José Luis Guillén Lanzas, 2023-12-01

www.joseluisguillenlanzas.com

https://www.safecreative.org/work/2312016266034-1089-el-oficio-de-torero_231201_011749-docx