El llanto de la ausencia Ausencia de mi mundo romántico y divino, cual raíces de historias en suspiros de mar, azul de una ilusión guardada en las memorias de un pretérito amado que ya no volverá. El llanto que me ahoga entre otoño de penas, suspirando la ausencia del aroma del mar, de los sueños dejados cual huellas en la arena, bañados por las olas que llegan y se van. El salitre de besos con aroma de encanto, celestiales y ascetas en el caos del mar, confundidos de anhelos ahogaron las historias en lágrimas de ausencia y anárquico bregar. El llanto de nostalgias, cascadas de mis sueños, cual lágrimas de intentos cegados por el mar tentando en su presencia a la desesperanza, velaron el destierro de un alma en soledad. Ausencia que cautivas un mundo que ha callado sumido en las tristezas de un mísero pesar , que el tiempo inexorable castiga en los vacíos que sólo en los recuerdos predican su verdad. Caricias de gaviotas traviesas, peregrinas en trino de esperanzas y ansiada libertad, empeñan el sublime tesoro de tus costas que el llanto de mi ausencia por siempre guardará. Ausencia de mi mundo, quijote del recuerdo, sorpresas y añoranzas que escrutan el azar, sarcasmo y desventura confiesan el destierro mientras danzan mis sueños a la orilla del mar. Aimée Granado Oreña © Gota de Rocío Azul