About the work
http://valentina-lujan.es/B/bienporquefuesepers.pdf
bien porque fuera persona retraída, de esas de las que se sabe muy poco de ellas y cabe suponerles tanto una llaneza rayana en lo simple como una susceptibilidad lindante con lo más enmarañado que pueda suponerse agazapado en el centro neurálgico de un complejo de vivencias adosadas de esas que son todas tan iguales que, cuando vienen las visitas o los novios de las niñas a buscarlas, se confunden de puerta y, los vecinos, los reciben con no menos naturalidad de aquella con la que dejan a la niña irse con un extraño porque, también los visitantes y los novios, son enormemente parecidos a todos los demás novios y visitantes o, pero en este caso mal, porque Luzmila no fuera tan desastre en cuestiones de organización como afirmase Teresita Ledesma pero tampoco la prudencia en persona; lo que nos dejaría en una especie de ambigüedad o indefinición en el que la mencionada se estaría moviendo en terreno de nadie y, todo el mundo lo sabe, los terrenos de nadie son siempre y aunque pueda parecer contradictoria, de todo el mundo o, más concretamente del primero que llega, que asienta sus reales y de allí, póngaste como te pongas, no hay quien lo mueva ni a risa ni a llanto ni a buenas razones ni a malos modales o de esas otras que se sabe tantísimo de ellas y de sus ascendentes que resulta del todo inconcebible imaginarlas lejos ni fuera de su propia historia por más que la tal historia sea la invención más o menos desafortunada o dichosa que la que Teodorico hiciese de la Gongordiola aficionada a las películas musicales cuando aquel muy turbio y nunca del todo aclarado asunto del vendedor ambulante y el tenedor de libros del señor Pedreras y, ello, pese a los denodados esfuerzos de Pedreras por levantar el asiento.
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About the creator
Escritora, porque la escritura es lo que profeso. Pero, no siendo la escritura mi fuente de ingresos, no me atrevería a denominarla mi profesión. No creo, por otra parte, que estuviera dispuesta a avenirme a complacer a nadie, lector o editor. Ni a comprometerme a cumplir los plazos de entrega a que deben ceñirse tantos de los que publican. Literatura por encargo, como si el escritor fuera un sastre o un fabricante de electrodomésticos. Me espanta el sólo pensarlo.
No tengo formación académica.
Ah, que se me olvidaba explicar a mis lectores, y a mis seguidores, y a mis amigos y enemigos, por qué "Telas de araña con bastón, canario y abanico"; y ello es por algo tan sencillo como el hecho de que la vida, todas las vidas, son exactamente una tela de araña, entretejiéndose, las unas con las otras.
He de confesar también que el título no se me ocurrió a mí; no. El título es el de un cuadro, grande, al óleo, que vi hace muchos años no recuerdo ya dónde en una exposición y en el que, aunque me dejé los ojos escrutándolo, no logré encontrar ni el bastón ni el canario ni el abanico y que, además y desafortunadamente, no recuerdo el nombre del autor.