La compañía ha alcanzado un acuerdo preliminar con el grupo de autores que había iniciado una demanda colectiva por el uso de sus libros para entrenar el modelo de inteligencia artificial (IA) Claude. De esta forma, la tecnológica estadounidense evita un juicio en el que, según los cálculos de los expertos, estaban en juego indemnizaciones multimillonarias que habrían desequilibrado sus finanzas.
El pacto se ha conocido en la última semana de agosto cuando los abogados de Anthropic y de los demandantes solicitaron al tribunal «la suspensión del procedimiento para recabar pruebas y la cancelación de los plazos procesales en curso», informa Diario Constitucional. Según este medio, en esta misma presentación, pidieron la «aprobación del convenio». En el documento judicial se fijó el 3 de septiembre como fecha para el cierre definitivo del acuerdo entre las partes, no obstante, hasta el día 8 no tendrá lugar la audiencia de aprobación preliminar.
Beneficios para todos los demandantes
En espera de la orden definitiva del juez William Alsup, que se producirá en unas semanas, no han trascendido los detalles del acuerdo. De momento, se desconoce el importe total de las compensaciones económicas pactadas, así como el mecanismo de distribución de las mismas entre los escritores demandantes, los autores afectados y las editoriales. Aunque Anthropic no ha querido hacer declaraciones, el abogado que representa a los escritores, Justin Nelson, ha manifestado a Wired que «este acuerdo histórico beneficiará a todos los miembros del grupo».
James Grimmelmann, profesor de Derecho Digital e Internet de la Universidad de Cornell, en declaraciones a Wired, ha advertido de la importancia de los términos del acuerdo: «La gran pregunta es si se producirá una revuelta significativa dentro del grupo de autores». Para el experto, será «un barómetro del sentir de los titulares de derechos de autor.»
Antecedentes del caso
Como ya se informó en Safe Creative, el origen de este caso se encuentra en la demanda que presentaron los conocidos autores estadounidenses, Andrea Bartz, Charles Graeber y Kirk Wallace Johnson contra la startup de IA por usar sus obras sin autorización. Aunque el veredicto del juez Alsup estableció que utilizar obras obtenidas de forma legítima pueden considerarse «uso justo», también determinó que emplear libros piratas para alimentar su IA constituía una infracción de derechos de autor.
Este fallo dio pie a la presentación de una demanda colectiva por copyright de los tres autores en representación de todos los autores que se vieron afectados por la descarga que hizo Anthropic de obras de sitos webs piratas como LibGen. La decisión judicial desató todas las alarmas en la tecnológica teniendo en cuenta que las sanciones que prevé la legislación estadounidense para este delito se establecen en 750 dólares por obra y las descargas ilegales de libros rondaban los 7 millones.
Riesgo de sanción cercana al billón de dólares
Justo estas cifras son las que manejan los expertos para considerar que el montante de las indemnizaciones a las que se exponía Anthropic podría superar «los 1.000 millones de dólares, incluso alcanzar la cifra de un billón», recoge Infobae. Un riesgo de magnitud considerable incluso para «comprometer la viabilidad financiera» de la empresa. De aquí la rapidez con la que ha actuado la startup.
De hecho, la asociación de escritores más potente de Estados Unidos, The Authors Guild, ya había comenzado a enviar un aviso para que estuvieran pendientes de si alguno de sus libros estaba incluido en la «lista de obras afectadas» que el equipo legal de los demandantes iba a presentar ante el tribunal.
Aunque este acuerdo no supone un precedente judicial vinculante, los especialistas consideran que podría ser «un referente práctico en el ámbito comercial y contractual», señala Diario Constitucional. Es muy posible que marque un antecedente en futuros litigios relacionados con el uso de libros para entrenar IA.
Fuentes: Diario Constitucional, Wired, Safe Creative, Infobae.
