About the work
https://valentina-lujan.es/C/caracoles.pdf
Los caracoles entonaban cánticos de iglesia llevando en sus brazos niños vestidos con trajecitos de colores muy vivos con el fin de recordar que —en tanto las empleadas responsables de abrillantar las hojas de los árboles no hubiesen retirado los restos calcinados de las pasiones que los supervivientes habían arrojado, humeantes aún, desde los balcones, lejos de sus almas sin el menor miramiento y sin cuidarse de no golpear a los incautos transeúntes que no se habían percatado todavía de que ya no tendrían que acudir nunca más a sus lugares de trabajo— se hacía aconsejable no difundir noticias que pudiesen favorecer que cundiese un pánico que había hecho su aparición varios meses atrás bajo el aspecto de pequeña sensación de ansiedad, de desasosiego causado por alguna horda descontrolada de no más de un centenar de argumentos que, desmarcados de entre los miles de pábulos que pudieran alentar a hacerse el loco o mirar para otro lado, incitaban, con suavidad y palabras persuasivas, a no dejarse engatusar por la evidencia de que hiciérase lo que se hiciese y buscárase donde se buscase se hacía más complicado de día en día el encontrar explicaciones.
El índice de exigencia descendió notablemente y, en tan sólo un par de semanas, dejaron de abordarse grandes cuestiones para centrarse en que hasta los esfuerzos más baldíos o avispados que presentaran el documento pertinente certificando su inutilidad se congregaran en un reducto pequeño y bien protegido, rodeado de alambradas altísimas, donde los especialistas en la materia dieron alguna esperanza un tanto desmedrada y remolona de que pudieran localizarse briznitas ― pequeñas o irreconocibles, advirtieron, sin querer asustar ― de esclarecimientos a interrogantes menores.
La preocupación, sin embargo o aliviada de cargas que representaran impedimento a sus ansias de expansión, con las manos libres para hacer a su antojo, se divertía en crecer forjando nudos que luego colocaba, bien apretados, en estómagos y pechos y gargantas.
3 de junio de 2010
Exequias
Poesía
Registered at Safe Creative
Code: | 2308044973266 |
---|---|
Date: | Aug 4 2023 12:39 UTC |
Author: | Afrodita |
License: | All rights reserved |
About the creator
Escritora, porque la escritura es lo que profeso. Pero, no siendo la escritura mi fuente de ingresos, no me atrevería a denominarla mi profesión. No creo, por otra parte, que estuviera dispuesta a avenirme a complacer a nadie, lector o editor. Ni a comprometerme a cumplir los plazos de entrega a que deben ceñirse tantos de los que publican. Literatura por encargo, como si el escritor fuera un sastre o un fabricante de electrodomésticos. Me espanta el sólo pensarlo. No tengo formación académica.