About the work
https://valentina-lujan.es/L/llamala.pdf
Llámala, llama a la llama, llama que será la llama que ya más nunca se apague porque será ya la llama que trepide en cada alma intrépida que sin miedo ni escuchando ya más cantos de sirenas ni rodados ni de cisnes ni robados a las gargantas que entonen alabanzas a lo alto, combatirá ya en su brillo, ya sin levantar la espada, la oscuridad tan profunda que de la negrura emana para allanar los caminos de los que ya más no tardan en emprender, bien prendidos, de sus frentes y en sus blancas intenciones ahora claras, los otrora cenicientos, apagados y contritos, sueños dormidos que aguardan el resurgir de la llama. Llámala, llama a la llama.
9 de noviembre de 2014
Silogismos
Comments
About the creator
Escritora, porque la escritura es lo que profeso. Pero, no siendo la escritura mi fuente de ingresos, no me atrevería a denominarla mi profesión. No creo, por otra parte, que estuviera dispuesta a avenirme a complacer a nadie, lector o editor. Ni a comprometerme a cumplir los plazos de entrega a que deben ceñirse tantos de los que publican. Literatura por encargo, como si el escritor fuera un sastre o un fabricante de electrodomésticos. Me espanta el sólo pensarlo.
No tengo formación académica.
Ah, que se me olvidaba explicar a mis lectores, y a mis seguidores, y a mis amigos y enemigos, por qué "Telas de araña con bastón, canario y abanico"; y ello es por algo tan sencillo como el hecho de que la vida, todas las vidas, son exactamente una tela de araña, entretejiéndose, las unas con las otras.
He de confesar también que el título no se me ocurrió a mí; no. El título es el de un cuadro, grande, al óleo, que vi hace muchos años no recuerdo ya dónde en una exposición y en el que, aunque me dejé los ojos escrutándolo, no logré encontrar ni el bastón ni el canario ni el abanico y que, además y desafortunadamente, no recuerdo el nombre del autor.