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Rechazada la demanda por plagio de la canción viral infantil Baby Shark

La célebre Baby Shark, la canción del vídeo más visto en la historia de YouTube, no es un plagio. Así lo ha confirmado la Corte Suprema de Corea del Sur, que ha rechazado la demanda por violación de derechos de autor presentada por un artista estadounidense, que defendía que la obra copiaba era una composición suya publicada años antes.

Los jueces ponen así fin a una batalla legal de más de seis años y dan la razón a la compañía coreana autora del tema viral, que aseguraba que sólo había versionado una melodía popular infantil, convirtiéndola en «un icono de la cultura pop».

Publicada en 2015, la canción de The Pinkfong Company se hizo rápidamente viral y supuso millones de dólares para la empresa, que cuatro años después fue demandada por el compositor Jonathan Wright, conocido como Johnny Only.

Según CNN, Wright acusó a Pinkfong –entonces, denominada SmartStudy– de haber copiado una canción suya de 2011, exigiéndoles una indemnización por infracción de derechos de autor de 30 millones de wones, unos 21.600 dólares. El compositor argumentaba que la versión coreana era «sustancialmente similar» a su obra, al coincidir en «la misma tonalidad, el mismo cambio de tempo, la misma melodía y ritmo».

Por su parte, Pinkfong aseguró desde el principio que su versión adaptaba una melodía tradicional estadounidense, muy popular en los campamentos infantiles de verano, y exenta de protección por derechos de autor. Según un comunicado, la compañía únicamente le había dado «un nuevo giro, añadiéndole un ritmo alegre y una melodía pegadiza, convirtiéndola en el icono de la cultura pop que es hoy en día», recoge Milenio.

El fallo no considera obra derivada la versión del demandante

Ahora el Alto Tribunal coreano ha sentenciado que la versión de Wright no puede considerarse «una obra creativa suya», al existir versiones previas sobre las que no añadió una creatividad significativa que sirva para otorgarle derechos exclusivos como obra derivada.

El fallo señala además que «no existen similitudes sustanciales» entre las versiones en litigio y que, pese a que es posible que el equipo de Pinkfong tuviera acceso al tema del demandante, «no había evidencia de que hubieran copiado las partes creativas» de su versión, explica el diario vietnamita Tuoi Tre.

La decisión de la Corte Suprema refrenda dos fallos provisionales anteriores que ya habían descartado la vulneración de la propiedad intelectual, añade RFI-AFP. Por otro lado, la sentencia sirve para confirmar el principio jurídico sobre las melodías populares como obras derivadas.

Más de 16.000 millones de visualizaciones en YouTube

En cualquier caso, el Baby Shark de Johnny Only tampoco fue el primero en lanzarse al mercado, pues anteriormente ya había habido adaptaciones en lugares como Alemania que se habían hecho virales.

Con todo, fue el lanzamiento de las versiones de Pinkfong en 2015 y 2016 –primero en coreano y con dibujos animados y, más tarde, con niños haciendo coreografías y cantando en inglés– las que hicieron extremadamente popular el tema, llegando incluso al puesto 32º del Billboard Hot 100.

De hecho, el vídeo de Baby Shark Dance es hoy el más visto de la plataforma YouTube, con más de 16.000 millones de visitas, según RFI-AFP, casi el doble que el segundo, el Despacito de Luis Fonsi y Daddy Yankee.

Gracias a este tema, Pinkfong ha obtenido beneficios con la venta de productos temáticos, programas de televisión, películas e incluso aplicaciones para móviles con los personajes que aparecen en la canción.

Reacciones de las partes a la sentencia

Tras conocerse el fallo, el abogado de Wright, Chong Kyong-Sok, calificó como «un poco decepcionante» la sentencia, si bien insistió en que «es nuestro trabajo el que salió primero, así que podemos manejar las licencias de nuestra parte, y supongo que luego cada uno sigue su camino», publica Times Union.

Por su parte, Pinkfong ha señalado en un comunicado que «la confirmación de la Corte Suprema de que no infringimos los derechos de autor es un reconocimiento justo de nuestros esfuerzos creativos».

Fuentes: CNN Español, Milenio, Toui Tre, Rfi.AFP, Times Union.

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