Natalia Royo, formada en la Escola Llotja de Barcelona, es una enamorada de la obra gráfica, en especial de la utilización de la serigrafía para la impresión de proyectos artísticos. En 2014, abrió Tintaentera, un taller de obra gráfica en el cual se dedica a editar obra de artistas, estampar por encargo y dar clases de serigrafía y grabado. Un taller, situado cerca del zaragozano Parque Pignatelli, que se ha ido transformando con el paso de los años y la evolución del mercado y de los intereses del público. Eso sí, sin perder en ningún momento el espíritu creativo de obra gráfica con el que se inició el camino.
Inicios
Mis primeros pasos los di en Barcelona, cuando estaba estudiando allí un máster que hice de espacio público. Me apunté a un taller con una grabadora que me pareció maravilloso y me enganchó la técnica. El grabado es una técnica que te enamora. De allí pasé a hacer el ciclo de grabado y técnicas de estampación en la Escola Llotja. Cursé esa formación con el objetivo de volver a mi ciudad natal y montar un taller de obra gráfica, que era algo que tampoco en esos momentos no había una oferta, y para mí era importante volver a mi ciudad, aportar lo que había aprendido y disfrutar con la obra gráfica, desarrollando también en mi propio espacio mis propios proyectos artísticos.
Obra
Mi trabajo consiste en enfocar todos los encargos que entran de estampación a la serigrafía o al grabado. Soy estampadora y esa es una diferencia importante entre otro tipo de técnicas de impresión, ya que la impresión al final la produce una máquina, aunque esté dirigida por profesionales en la parte de atrás, y el oficio de un estampador o estampadora, como es mi caso, se dedica a ver el proyecto desde que lo trae el cliente, analizar cómo se puede realizar en una de las dos técnicas de estampación y sacarle el máximo provecho, adaptar esa obra a una nueva versión, que sería la serigrafía o el grabado.
Mi obra la definiría como llena de color, de texturas, ya que me gusta mucho jugar con las texturas. Soy bastante abstracta a la hora de crear. Aunque puedo hacer cosas más figurativas, me suele tirar más la geometría o la abstracción y me gusta mucho el color, jugar con colores, con superposiciones. El color para mí es fundamental en la obra y, aunque también he hecho cosas en grabado, en tonos negros, el color siempre me termina llamando. Es como mi vínculo para la creación. La verdad es que no busco muchas veces transmitir nada en concreto con mi obra, sino que me dejo disfrutar o experimentar con esos colores, y a lo mejor sí que es por una necesidad de exteriorizar, que estamos vivos, que necesitamos que la vida esté llena de color y no de penurias y de cosas tristes, que es un poco lo que también nos hace tener más vitalidad.
Tintaentera
Tintaentera es un taller de obra gráfica que monté en el 2014. Mi objetivo era enfocarme principalmente a la obra gráfica y coger cada vez más proyectos de ese tipo de índole. Al final también han surgido otro tipo de proyectos enfocados al textil, estampaciones que se pueden hacer en serigrafía. Otra de las cosas que también hago es dar clases, enseñar las técnicas a los alumnos que quieren aprenderla, y alquilar el espacio a artistas que no tengan instalaciones propias y puedan desarrollar aquí de una manera fácil sus proyectos de serigrafía o de grabado.
Proyectos
Tenemos ahora un proyecto muy bonito, muy interesante, con Silvia Peggins, que es para el Pablo Serrano, el Museo de Arte Contemporáneo de Aragón. Y además han entrado también dos proyectos que tienen que estar antes de que acabe el año. Uno es para Bodegas Enate y otro es para una empresa de Huesca, que también en ese compartiremos lo que es el trabajo de estampación con mis compañeros de Taller Mooses. Ellos se van a dedicar más a lo que es la reproducción, porque es un cuadro bastante complicado de sacar en serigrafía, y las carpetas que sí que van a ir serigrafiadas me encargaré yo de hacerlas.
Futuro
El papel va a estar vivo siempre. Lo que pasa es que es un poco complicado en el mundo actual, que los que nos dedicamos al tema papel, a la obra gráfica, al libro, a la estampación, incluso a la impresión, sepamos cómo podemos llegar al público. Pero al final se materializa con el tacto. Eso es algo que cuando vas a una feria o cuando haces una edición y el cliente ve algo estampado sobre papel y ve la calidad, le transmite algo. Por eso, por muchas cosas digitales que puedan existir, el papel no se va a perder.
Inteligencia artificial
Con la inteligencia artificial, mi relación a la hora del trabajo, del día a día, es nula, porque realmente yo no utilizo esta herramienta que ahora está tan en auge. No la utilizo, en ninguna de sus posibilidades, porque no es que no me interese, sino que no le veo para mí ahora mismo posibilidades. Igual en un futuro, analizando herramientas y demás, podría llegar a tener algo de interés.
Derechos de autor
En ningún momento me he planteado que una gestión de los derechos tendría que ser algo muy controlado por mi parte. Igual confío demasiado en el ser humano. En el sentido de creer que nadie te tiene por qué usurpar tu diseño. Eso es algo que debería estar implícito en la creación. Si un creador ha hecho un diseño, no tiene por qué basarse específicamente de ese diseño para hacer una copia. Todos nos podemos inspirar de otros artistas y nos hemos inspirado. Si buscas, seguramente hay muchísima gente que utilice colores como los utilizo yo, o formas de estampar muy similares. Pero es verdad que los derechos de autor son algo que hay que trabajar. No, no, pues ya está, es muy fácil y no duele casi.
