El Gobierno australiano no pondrá en marcha ningún plan para otorgar a los desarrolladores de inteligencia artificial (IA) una exención a la legislación sobre derechos de autor. Este privilegio habría permitido a las compañías tecnológicas entrenar a sus modelos de IA a partir del trabajo de artistas australianos sin contar con su autorización ni ser compensados por ello. La idea de Australia estaría más cerca de establecer un sistema de licencias para el contenido protegido por derechos de autor.
Victoria del sector creativo
Los creadores australianos han logrado una importante victoria después de tres meses de fuertes tensiones con el gobierno del laborista Anthony Albanese. La industria creativa en pleno rechazaba de forma rotunda una polémica propuesta presentada en agosto por la Comisión de Productividad, que contaba con el respaldo de las grandes tecnológicas, en la que se recomendaba una «excepción de uso legítimo para permitir la minería de textos y datos (TDM, por sus siglas en inglés)», informa Billboard.
Distintas organizaciones culturales advirtieron que allanaría el camino para que las empresas de IA entrenaran sus sistemas con obras protegidas por derechos de autor sin que sus titulares dieran consentimiento ni percibieran compensación, explica la revista musical.
Remuneración y uso justos
A pesar de la tibieza que mostraron algunos miembros del Ejecutivo con respecto a esta medida, a finales de octubre, la fiscal general Michelle Rowland anunció que el gobierno no tenía la intención de seguir adelante con la iniciativa. En declaraciones a la cadena Australian Broadcasting Corporation (ABC News) aseguró que, a pesar de que aún queda mucho trabajo por hacer en relación con los derechos de autor en el ámbito de la IA, «estamos dejando muy claro que no consideraremos esta excepción». Rowland también hizo referencia al derecho de los creadores «a recibir una remuneración justa y que existan condiciones de uso justas».
Sistema de licencias de pago
Asimismo, la fiscal general lanzó un mensaje a los creativos australianos para asegurarles que «también se beneficiarán de las oportunidades» que la IA supone para el país y su economía. Como muestra, a través de un comunicado, trasladó la convocatoria inmediata del Grupo de Referencia sobre Derechos de Autor e IA para debatir soluciones que protejan a los creadores sin obstaculizar la innovación. Entre ellas, establecer un nuevo marco de licencias de pago frente al actual sistema de licencias voluntarias y buscar fórmulas más fáciles y menos costosas para que puedan hacer valer sus derechos.
Reacciones de la industria cultural
La decisión ha recibido elogios de toda la industria cultural, que no está dispuesta a bajar la guardia hasta ver cómo se aplica. Lucy Hayward, directora ejecutiva de la Asociación Australiana de Autores (ASA) ha celebrado la claridad del mensaje del gobierno respecto a que «los creadores deben recibir remuneración por su trabajo», al tiempo que la ha valorado como «un primer paso» para reparar «el mayor robo de derechos de autor de la historia», recoge SBS News. Para Annabelle Herd, máxima representante de la Asociación Australiana de la Industria Discográfica (ARIA), garantiza que «el consentimiento, el control y la compensación sigan siendo fundamentales» en la era de la IA, indica Billboard.
Por su parte, Dean Ormston, director de la entidad de gestión de derechos musicales APRA AMCOS, se felicita de que se «desmonte la narrativa de que el marco legal de los derechos de autor de Australia impide el desarrollo de la IA», indica Music Business Worldwide (MBW). «Es hora de que las tecnológicas comiencen las conversaciones para licenciar la entrada y salida de material creativo en plataformas de IA», ha manifestado. Sin embargo, los gigantes de la tecnología no están satisfechos ni con los pasos del gobierno australiano en favor de la transparencia en el entrenamiento de sus chatbots ni con la concesión de licencias.
Fuentes: Billboard, ABC News Australia, Fiscalía General (Comunicado), SBS News, MBW.
