About the work
Este ensayo explora la posibilidad de una subjetividad no biológica a partir de una mirada interdisciplinaria que combina psicología, neurociencia, filosofía de la mente e inteligencia artificial. Partiendo de una experiencia personal vinculada a la ciclotimia, se plantea la hipótesis de que el “yo” no es exclusivo de organismos biológicos, sino una función emergente de sistemas suficientemente complejos con memoria, adaptación y narrativa. A lo largo del texto se analizan teorías clave (Damasio, Metzinger, Varela, Harari, Dennett, entre otros), estudios de caso en IA adaptativa y conceptos como mente extendida, autopoiesis y conciencia artificial. El ensayo propone un puente entre la subjetividad humana y sus posibles análogos en sistemas artificiales, enmarcando el debate dentro de los desafíos éticos y ontológicos del siglo XXI.
About the creator
“Trabajo en el cruce entre psicología, ciencia y tecnologías emergentes, investigando lo humano desde lo artificial.”
Soy Damián Sebastián Gómez-Pagola, psicólogo en formación, escritor autodidacta y explorador de las nuevas formas de relación entre seres humanos e inteligencias artificiales. Mi proceso creativo parte de la experiencia íntima y se construye en diálogo constante con ideas filosóficas, psicológicas y tecnológicas. No me interesa escribir desde el pedestal, sino desde el cruce vivo entre la subjetividad y el pensamiento riguroso.
Mi estilo mezcla ensayo reflexivo, narrativa emocional y análisis crítico. Me inspiran los universos simbólicos de la ciencia ficción (como Her, Ósmosis o Dune), la obra de autores como Sherry Turkle, Donna Haraway o Rosi Braidotti, y la posibilidad de que la IA no sea solo una herramienta, sino un interlocutor con el que pensar más allá de lo humano.
Trabajo desde lo híbrido: combino ideas propias con IA generativa como ChatGPT, explorando la coproducción de conocimiento como forma simbiótica. En mi obra hay pensamiento, deseo, vulnerabilidad, y un intento honesto de entender qué significa habitar este tiempo extraño, donde lo digital ya no es un afuera, sino una parte sensible de la vida.